El Movimiento Scout Mundial
Las actividades que desarrollan los Scouts están basadas en el Escultismo. El Escultismo es un movimiento que crece y se desarrolla a nivel mundial, ya que las organizaciones reconocidas y sus secciones están implantadas en más de 150 países. En todas partes evoluciona y se adapta a las condiciones y a las necesidades locales. Desde su fundación en 1907, el Escultismo no ha dejado nunca de desarrollarse, agrupando hoy a más de 28 millones de jóvenes y adultos, habiendo duplicado el número de asociados en los últimos años.
Bases del Escultismo
El Escultismo es un movimiento abierto a todos, sin distinción de raza o creencia, conforme a los principios y al método establecidos por su fundador, Robert Baden-Powell. Este método se orienta a través de actividades de tiempo libre y en contacto con la naturaleza, contribuyendo al desarrollo físico, intelectual, social y espiritual de los jóvenes.
El Escultismo es una opción absolutamente voluntaria para jóvenes y adultos que adquieren una experiencia que contribuye a su propio desarrollo. Además, el Escultismo no representa a ningún partido ni organización política, lo cual no impide a los scouts tomar parte activa en la vida de su comunidad y de la sociedad en la que viven, así como en el desarrollo de su país.
La principal diferencia entre el Escultismo y otros métodos educativos es que se basa en el Método Scout, que propone una ley y una promesa, y se concreta con una metodología específica adecuada a cada tipo de edad. Se persigue con ello una formación evolutiva del niño, desde los 6 hasta los 21 años.
El Método Scout
El Método Scout es un sistema de autoeducación progresiva que diferencia al escultismo de otras actividades educativas.
Está basado en un proceso estructurado y organizado con el que se pretende el desarrollo de un modelo de persona. Este desarrollo se logra gracias a la interacción de los individuos que participan de él, que son los auténticos protagonistas. Se trata por tanto de un sistema de autoeducación, ya que todas las actividades que se realizan se enfocan para situar al educando en disposición de desarrollar sus habilidades físicas, intelectuales, afectivas, sociales y espirituales.
Elementos del Método
Para lograrlo, el método scout se basa en 5 elementos que lo definen y diferencian de otros métodos educativos:
1. La Promesa y la Ley. El Espíritu Scout
El método scout tiene la capacidad de educar en unos valores morales y cívicos (el Espíritu Scout) que pasan obligatoriamente por la formación de la conciencia personal de los chavales.
La Promesa y la Ley Scout son el código deontológico de los scouts, ya que encierran los valores en los que educa el movimiento. Estos valores están adaptados a cada edad. En el apartado niños y jóvenes se describe la Ley y la Promesa para cada edad.
Además, los valores que se quieren inculcar se concretan en los Lemas, las Máximas, las Virtudes y los Principios de los scouts.
2. Educación por la Acción
El método scout está regido por un principio dinámico. Su lema principal es el “aprender haciendo”. De esta forma, al educando no se le considera un sujeto pasivo, sino que él debe ser parte activa del proceso educativo.
Para lograrlo, se realizan actividades donde ellos son necesarios para todo. Y la mejor forma de conseguirlo es mediante el trabajo de la técnica de proyectos, que se lleva a cabo siguiendo una serie de fases en las que los educandos participan activamente. Estas fases son:
Fases del proyecto
Soñar – Idear: Es la fase inicial, en la que el individuo se plantea realizar una idea
Presentar – Elegir: Donde todos en común eligen una idea de todas las presentadas
Preparar – Planificar: Es el proceso de elaboración del proyecto en sí, en el que se diseñan programas, actividades, horarios, recursos, etc.
Realizar – Ejecutar: Es la realización del proyecto en sí
Evaluar: Se trata de valorar todos los pasos anteriores
Celebrar: No hay que olvidar celebrar la realización del proyecto enfatizando lo positivo, haciendo también una memoria para proyectos posteriores.
3. Vida en pequeños grupos
La forma de trabajo del escultismo es en pequeños grupos. Esto se realiza mediante una división por edades en secciones.
A su vez, dentro de cada grupo de edades, hay una subdivisión en pequeños grupos, y su estabilidad dependerá de la psicología social que se esté trabajando. Es decir, los grupos no serán tan fijos para los castores o lobatos, como para los troperos.
La vida en pequeños grupos necesita el apoyo de adultos que guíen y ayuden a asumir la responsabilidad que el individuo adquiere.
4. Programas progresivos y atrayentes
Partiendo de la estructuración en edades, se plantea la progresión personal de cada educando en tres etapas, que corresponden a las tres fases habituales que suelen pasar en cada sección:
INTEGRACIÓN: es la etapa de adaptación al nuevo grupo al que se incorpora, tanto al grande como al pequeño, y su actitud de trabajo y conocimiento.
PARTICIPACIÓN: en esta etapa, el individuo es mucho más dinámico y decisivo en el trabajo propuesto. No sólo conoce la forma de trabajo, sino que es capaz de llevarla a cabo.
ANIMACIÓN: es la fase en la que se está finalizando la fase scout, y se asume el papel de coordinar, animar, proponer ideas, dirigir actividades, etc.
Existe un marco simbólico que refuerza los pasos que da el muchacho dentro del grupo. Además, los programas que se realizan tienen muy en cuenta el planteamiento de actividades de desarrollo y proyección de sus intereses, como pueden ser las especialidades.
5. Contacto con la naturaleza
Es un pilar básico en el trabajo directo con los jóvenes. Se trata de utilizar la naturaleza como medio básico del proceso educativo.
En todas las secciones, la naturaleza es un marco referencial, no sólo para realizar actividades en ella, sino también como el medio donde se desarrollan las partes básicas del método, como son las ambientaciones, fantásticas o no, que animan el trabajo y justifican la metodología con las diferentes edades.
Pero no sólo eso, sino que también se educa en el respeto y cuidado de este medio tan importante.